Eran cerca de las 9 de la mañana del 17 de julio de 2014,
cuando en el sitio arqueológico de Ninamarca, ubicado a mitad del camino
entre Cusco y Paucartambo, descendía de
un vehículo una jovencita cuya belleza impactaba a quien la viera. Estaba
acompañada de dos varones, uno de ellos, su padre, el conocido actor español
Antonio Banderas, y un guía turístico.
Stella del Carmen y Antonio Banderas visitaron el santuario
de la Virgen del Carmen en Paucartambo. En la iglesia, Stella conoció junto a
su progenitor la imagen de la Santísima, de quien es ferviente devoto el actor
español, al extremo que cada año en Semana Santa vuelve a su tierra, Málaga,
para participar de los actos religiosos en honor a la Virgen de la Esperanza.
Para Antonio Banderas, su amor por la Virgen del Carmen es
tan grande como el que le tiene a su querida Stella del Carmen, su más grande
tesoro.
FUENTE DIARIO CORREO DEL CUSCO.
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